Precioso Reloj Bolsillo Antiguo Paul Jeannot de Oro 18K. Suiza, Sobre 1880

Antiguo Reloj Bolsillo Paul Jeannot de Oro 18K. Suiza, Sobre 1880

Este exquisito reloj de bolsillo antiguo firmado por Paul Jeannot y manufacturado en Ginebra, Suiza, alrededor del año 1880, representa una joya auténtica tanto por su valor estético como por su excelencia técnica. Realizado en oro de 18 quilates (18K), este reloj saboneta de triple tapa combina la suntuosidad de la orfebrería con la maestría relojera suiza del siglo XIX. Es un reloj sólido, robusto y con una presencia imponente. Su peso de más de 100 gramos subraya la nobleza del material, mientras que cada detalle revela la mano de un artesano refinado.

El reloj cuenta con tres tapas de oro: la delantera, decorada con un precioso escudo grabado a mano que incluye un monograma, probablemente del propietario original; la trasera y la tapa guardapolvo están finamente grabadas con guilloché en grano de avena, una técnica clásica de grabado ornamental que se conserva en un estado excepcional. Las dos tapas exteriores muestran claramente el sello del oro de 18K, junto al número de serie 1441, evidencia de su autenticidad y noble origen.

La esfera, una pieza de gran delicadeza, está decorada en plata y oro, con números romanos negros, un segundero independiente a las 6 y elegantes agujas negras en forma de ‘poire’. En la posición de las 12 se lee la firma Paul Jeannot Genève, confirmando su procedencia de uno de los centros relojeros más importantes de Europa.

Al abrir la tapa guardapolvo, también en oro aunque sin contraste, se encuentra una refinada inscripción grabada que indica: “Ancre, Ligne Droite, 15 Rubis, Paul Jeannot Genève, Nº 5868”, junto a la palabra “Nickel”, correspondiente al material usado en la platina de la maquinaria. La maquinaria se protege con una segunda tapa de cristal, que permite admirar el mecanismo decorado con precisión y belleza, con rubíes engastados y grabados a mano.

El reloj se encuentra en funcionamiento y en excelente estado de conservación, con todas las tapas firmes y un cierre preciso. No se aprecian defectos significativos, solo minúsculas señales de uso propias de su antigüedad, que lejos de restarle valor, aportan autenticidad y carácter a esta excepcional pieza.

Esta magnífica obra es una elección sobresaliente para los coleccionistas exigentes, amantes del arte relojero antiguo, y una excelente inversión a largo plazo. Un objeto que conjuga historia, estética y precisión.

No dejes pasar la oportunidad de adquirir una joya de este nivel. Su belleza atemporal y su impecable mecánica lo convierten en una pieza única.

Medidas: 5,1 cm (2 in). Peso: 106,7 g.

Historia de Paul Jeannot

Paul Jeannot fue un distinguido relojero suizo activo principalmente en la segunda mitad del siglo XIX, con base en Ginebra, uno de los epicentros históricos de la relojería de alta gama. Jeannot formó parte de la tradición artesanal que consolidó a Suiza como referencia mundial en precisión mecánica, especialmente entre los años 1850 y 1900, cuando la demanda por relojes de bolsillo de calidad alcanzó su apogeo entre la burguesía europea y la aristocracia.

Jeannot se especializó en relojes de movimiento ancre (áncora) con línea recta, conocidos por su fiabilidad y durabilidad. Sus relojes incluían con frecuencia 15 rubíes, un número considerado óptimo para minimizar la fricción en los puntos clave del mecanismo. Firmaba tanto las esferas como los puentes de las maquinarias, un detalle poco común que denota orgullo por el trabajo bien hecho y garantiza la autenticidad de la pieza.

Aunque no alcanzó la fama internacional de firmas como Patek Philippe o Breguet, Paul Jeannot goza hoy de una creciente revalorización en el mercado del coleccionismo gracias a la calidad de sus piezas y a su carácter artesanal. Sus relojes se distinguen por una combinación equilibrada entre sobriedad y lujo, con cajas de oro de 18K trabajadas con delicadeza, esferas de metales preciosos y maquinaria fiable.

En la actualidad, los relojes de bolsillo firmados por Jeannot, especialmente aquellos en excelente estado y con caja de oro, son buscados por coleccionistas en Europa y América. Se consideran piezas ideales para iniciarse en la relojería suiza del siglo XIX, o para enriquecer colecciones centradas en la estética y funcionalidad clásica. Esta revalorización constante refuerza su potencial como objeto de inversión.